Hola genias! Gracias por leer! He tenido algunos problemas para enviar la otra pero les juro que cuando tenga tiempito la termino de enviar! ^^ Una cosa, JULI necesito tu ayuda para eso de la reduccion de palabras? O como sea y para lo de agregar y que asi te aparezca!
CHARI, esta nove no tiene nombre :S Es que nunca se me ocurre nada pero que tal si recomiendan?
Besos, nos vemos mañanita :) Si Dios quiere qq
Capitulo 4:
Peter había dejado hecho huevos y tostadas así que
aproveché de desayunar. Antes de irme hice su cama y me puse a captar el aroma
de su ropa porque definitivamente era más atractivo y adictivo que una droga. Me
puse a ver sus fotos de pequeño y con su familia, no de intrusa sino por...
curiosidad. Era raro, si, pero también lo era que un desconocido me hubiese
dejado en su departamento sin conocerme y que además se preocupara por mi
estado. Además, el observar a ese chico de alguna forma lograba que dejara de
pensar por un momento, solo por un momento en todo lo demás. Y eso que no había
compartido nada con él pero aun así, sin conocerme, me sacó de un accidente,
curó mis heridas, me dejó dormir en su cama y lo más importante, NO TUVIMOS
SEXO.
-¡Hola hermanita!
En cuento abrí la puerta de mi departamento escuché la
voz chillona de mi hermanastra
-Hola Eugenia... ¿Qué haces aquí?- pregunté sin ningún
entusiasmo dejando sobre la mesa algunas cosas que había comprado en el super
-Pues lo obvio! Te extrañaba y quise venir a la
hermanastrita más linda del mundo!- acomodó su cabello rubio, se quitó los
tacos de 15 cm que traía y se tiró sobre el sillón- No, es broma, la verdad es
que supe que se va a inaugurar una súper semana de la moda y OBVIO no me la
podía perder!
Escuchar el tono de su voz y las estupideces que decía me
hizo recordar una de las razones por las que me había ido de la casa cuando mi
papá se casó con la madre de Eugenia
-Y... no me digas que piensas quedarte aquí.
-Pero of Course! Por cierto, tu departamento está
PRECIOSO! Claro, con todo el dinero que te envía tu papá... Aunque déjame
decirte que lo ocupas bastante mal eh, ¿Qué es esa ropa? O sea, los tacos son
para hacerte crecer Lali, tú que eres... como decirlo de buena forma... pequeñita,
deberías usarlos con más razón.
-Euge...- suspiré tratando de contenerme- Los tacos no te
hacen crecer, solo te hacen lucir más alta pero aun así todo el mundo se da
cuenta de tu verdadera estatura, además, no voy a matarme toda la noche con
tacos solo para verme más alta.
-Ay...- intentó ignorar mi comentario- No hay caso
contigo Mariana.
-Me da igual lo que pienses. Y sobre lo de quedarte aquí
Eugenia...
-Era una broma- aclaró interrumpiéndome- Me voy a quedar
en uno de los edificios de los Huidobro- Camaño ¿Los recuerdas? Bueno, el punto
es que tienen de los mejores departamentos de la ciudad y encima quedan en el
centro de la ciudad así que no me va a costar nada ubicarme... Y no me vas a
creer pero el chico del departamento del frente es un BOMBON! Llegué hoy en la
mañana y justo cuando venía con todas mis maletas más que complicada aparece EL
que iba a su trabajo y me ayudó con mis cosas... O sea que mejor recibimiento!
Y para colmo tiene buen apellido...
-¿Eugenia que hay de importante en los apellidos?
-Muchísimo! Imagínate, Eugenia Contreras de Lanzani.
Porque MUERETE! Era un Lanzani.
Yo ni siquiera ubicaba a los Lanzani pero fingí que si
para que Eugenia no me diera un tremendo discurso sobre la “importancia” de esa
familia
-¿Y qué? ¿No me vas a preguntar como se llamaba?
-¿Cómo se llamaba Eugenia?
-Si me lo preguntas así no te digo- reclamó
-Entonces no me digas- dije encogiéndome de hombros
-Se llamaba Peter... Peter Lanzani.
Cuando dijo el nombre comencé a interesarme en la
conversación
-¿Y como me dijiste que se llamaba el edificio donde te
hospedabas?- pregunté intentando disimular el interés
-No me acuerdo
pero es de la compañía de los Huidobro-Camaño, ¿te acuerdas que una vez fueron
a comer a casa para discutir sobre negocios con papi?
Eugenia le tenía ese apodo a mi padre y a él
personalmente le fascinaba porque sabía que yo nunca le diría así
-Si, recuerdo... ¿Y, solo por si me dan ganas de ir a
verte en que habitación te hospedaras?- era la única pregunta que me faltaba
para saber si era el mismo Peter que yo pensaba porque el nombre y el edificio
coincidían
-¿Debo creer que estás
interesada por visitarme?- soltó una carcajada incrédula- Como sea, es el 153,
en el tercer piso. Bueno lindita, te dejo porque el bombonazo me invitó a una
disco hoy en la noche y tengo que prepararme!
Peter la había invitado a
una fiesta. Claro, cualquier hombre con sus cinco sentidos bien puestos
invitaría a Eugenia a salir.
-Son las tres Euge... las
fiestas, al menos aquí, no comienzan antes de las once.
-Lo sé linda pero para
verse bella hay que ver estrellas! Bye Bye.
Y llegó la noche otra
vez. Eran cerca de las once cuando desperté y tenía tres llamadas pérdidas de
David y otras cuatro de un número desconocido. Me levanté con dificultad y fui
al baño a mojarme la cara para despertar. Me puse un jeans pitillo de mezclilla
y una camisita a cuadros abierta con una polera musculosa blanca debajo. Había
hablado con Juan Pablo y me llevaría pasta base sin sexo a cambio porque,
aunque era él más rudo, fuera de David, de los narcotraficantes que conocía
tenía “otros gustitos” o como le dijera con tal de no admitir que era gay. Como
fuera, a mi no me importaba con tal de que a cambio de dinero me diera lo que
más quería.
-Lali, te estaba
esperando.
Juan Pablo me saludó con
un choque de manos cuando llegué hasta la barra.
-¿Cómo estás?- le
pregunté
-Bien, pero tu
seguramente no tanto.
-¿Por qué lo dices?
-David- hizo una mueca-
Ya sabes que cuando se le mete algo en la cabeza no lo deja tan fácilmente.
Entendí de inmediato de
que hablaba
-¿Lo has visto aquí?- no
pude evitar me preocupación. Antes de acostarme con David había escuchado mucho
de él.
-Te estaba buscando hace
un rato. Al parecer eres buena en la cama eh!- soltó una carcajada y me dio un
golpecito en el hombro
-No seas idiota- reí
también
Conocía hace años a Juan Pablo porque habíamos
sido compañeros en la básica y antes de convertirme en la mierda que era
habíamos sido amigos así que aceptaba sus bromas
-Lo digo en serio, David
es...
-¡Marianita!- la voz de
David a mi espalda interrumpió a Juan Pablo
-Hola David- dije dándome
la vuelta
-Anoche te fuiste y tuve
que pasar la noche en la comisaría solo. Pero no te preocupes, no estoy
enojado, contigo es imposible enojarse.
Me tomó de la cintura
bruscamente y me dio un beso exagerado
-Da... David- intenté
separarme
-Vamos a una pared.
Quiero hacerlo contigo ahora.
-No quiero David- intenté
zafarme y Juampa quiso ayudarme pero los amigos de David lo detuvieron
-¿Sabes? Te he extrañado.
Me dio un lengüetazo
indecente por el cuello
-No quiero- repetí
No tomó en cuenta mi
acotación y tiró de mí hasta llegar a una pared donde no había nadie
-Te deseo tanto Mariana-
estaba agitado- ¿Lo sientes?
Continuará ^^